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  Eduardo
Galeano
 
No dejan ver lo que escribo porque escribo lo que veo.


 
 
   
 7 DE JUNIO DE 2000  
 
El Tribunal Supremo estima la primera parte del razonamiento esgrimido por la defensa de Negu Gorriak y Esan Ozenki, que exponía que la demanda de Rodríguez Galindo, ya en prisión, estaba mal planteada al imputar a personas como Jon Maia, que no habían tenido relación con la composición del tema y que no incluía a Mikel Campos, uno de los autores de la canción. Esta persona veía así sus derechos lesionados al no tener oportunidad de ser escuchado y si por ejemplo condenado.

El magistrado da por válido este primer argumento de los trece motivos expuestos para anular la condena presentados por el abogado de Negu Gorriak y Esan Ozenki, Miguel Castells, y no entra a valorar si “Ustelkeria” está o no, amparada por el derecho a la libre expresión y absuelve a Negu Gorriak, grupo que ya se había disuelto a finales de 1996.

La posibilidad de recurrir y alargar el proceso dos o tres años para elevar la demanda al Tribunal Constitucional no tiene visos de ser llevada a cabo: "Rodríguez Galindo puede recurrir, pero lo tiene crudo, y si está bien asesorado lo lógico es que de el asunto por zanjado" declaro Miguel Castells.

 
 
   
 10 DE ENERO DE 2001  
 
Finalizado el plazo que tenía la defensa del entonces General para recurrir la sentencia del Supremo. Negu Gorriak anuncian su regreso para celebrar “esta victoria de la palabra” en dos emocionantes e intensos conciertos benéficos a finales de febrero que debido al clamor popular por verles se convierten en tres. En total unas 30.000 personas vibran con el grupo y celebran su victoria judicial en tres noches para la historia del rock vasco.

Todos los participantes en la campaña Hitz Egin! recibieron una entrada para estos conciertos y una edición del disco “Ustelkeria”, que se puso por primera vez a la venta en tiendas, con un libreto actualizado.

Los fondos de la caja de seguridad que creó el grupo para hacer frente a la posibilidad de una dura sentencia económica, son repartidos entre tres medios de comunicación reconocidos en su defensa de la libertad de expresión.

Ocho años después La libertad de expresión consiguió una nueva victoria contra los inquisidores de las palabras. La principal pelea emprendida por el grupo está ganada.