El
mejor disco del 91 según Rockdelux
demostraba la efectividad de los recursos
musicales aplicados en "Negu gorriak".
Un sustrato con fundamento compuesto de rock,
rap y reggae, por este orden, propicia la
construcción de una estructura abierta
a nuevas formas que superan el mero crossover.
Fugazi (versión de "Song Number
One"), Los Van Van, Sly Stone, George
Clinton, Linton Kwesi Johnson, Bad Brains,
Aretha Franklin, Rubén Blades y muchas
otras referencias engarzan la frescura de
un disco que se apoya en ritmos metálicos
y guitarras p-funk para remarcar que la postura
del grupo es firme y que aquí no hay
concesiones. "Gure jarrera" es una
celebración sensata, a veces tocada
por la fatalidad ("Lehenbiziko bala")
y el odio, que se interroga sobre soluciones
reales y no sobre sueños imposibles,
que esquiva el cinismo con ironía ("Zipaioen
matxinada") y que cuando es necesario
denuncia sin miedo (al entonces Teniente Coronel
Rodríguez Galindo en "Ustelkeria":
"La Guardia Civil pilló una tonelada
de coca y en la comisaría desaparecieron
150 kilos". Galindo denunció al
grupo y el juicio dictó sentencia favorable
al guardia civil, aunque sigue pendiente de
recursos. A Galindo lo encarcelaron más
tarde por su presunta implicación en
casos de tortura y guerra sucia). Casi al
final, justo antes de esa "Gora herria"
tocada por la médula latinoamericana
que les conecta con la resistencia de Víctor
Jara ("las gargantas poderosas no se
pueden ahogar") y la esperanza de las
revueltas populares, Antón Reixa, en
otro guiño a Public Enemy, se pregunta:
"¿Quién teme a un planeta
vasco". Ocho años antes del pacto
de Lizarra. Esperanzador. 8´5.
I[
XAVIER CERVANTES / ROCKDELUX ] |